1 – Dificultad para experimentar niveles apropiados de autoestima.
La persona con codependencia tiende vivir los dos extremos de la valoración de sí mismo: o bien sobrevalora o bien subestima sus capacidades. Esto se expresa en la disposición a ejercer control constantemente hacia el otro o la otra como condición para sentirse amada o amado. Esto lo hace mediante gritos, amenazas, en los casos en que se sobreestima; y mediante chantajes, chismes, intriga, victimización, en los casos en que se subestima.
2 – Dificultad para establecer límites funcionales con las demás personas; es decir para protegerse a sí mismos.
Ya sea que la persona con codependencia carece de límites y permite la invasión de las demás personas a su privacidad, ya sea que se muestre invulnerable y no permita que nadie se le acerque, en ambos casos la persona codependiente sufre como consecuencia un gran resentimiento.
3 – Dificultad para asumir adecuadamente la propia realidad; es decir para identificar quién se es, y cómo compartir adecuadametne con los demás.
Esta dificultad se expresa en la desconfianza de sí mismo y de los demás. Incapacidad para distinguir sus sentimientos: llora cuando está enojado, se enoja cuando está triste. La persona con codependencia también puede experimentar una seguridad tal de que conoce su realidad que se encierra en sí mismo y se limita a imponérsela a los demás con desdén.
4 – Dificultad para afrontar de un modo interdependiente las propias necesidades y deseos como adulto; es decir para cuidar de sí mismo.
Se encuentra atrapado en una situación en la que o bien los demás son siempre más importantes que él o ella, o bien se muestra egoísta y reserva lo mejor para sí. Siempre tiende a confundir sus necesidades con sus deseos. Descuida su vestimenta, su salud física.
5 – Dificultad para experimentar la propia realidad con moderación, es decir para ser apropiado con la edad y las diversas circunstancias.
Se manifiesta en las dos tendencias extremas de o bien sacrificarse por los demás (hijos, Iglesia), temer causar daño o importunar, o bien de aprovecharse de las circunstancias y servirse de las cosas y de los demás cuando sea posible. El resultado es la dificultad para establecer relaciones de intimidad. Por un lado una persona codependiente puede sentir que hostiga a la persona que ama, y por otro lado puede sentir frialdad e indiferencia, siendo incapaz del compromiso inclusive en el matrimonio.
Síntomas secundarios: (surgen del problema nuclear que es la deteriorada relación que mantienen con ellos mismos) a) control negativo; b) rencor ; c) espiritualidad deteriorada; d) adiciones o enfermedad mental o física y e) dificultad con la intimidad.